Código de Prácticas de Higiene para las Frutas y Hortalizas Frescas: Cómo Proteger la Salud del Consumidor
En el sector de frutas y hortalizas frescas, la inocuidad alimentaria es una prioridad para todos los actores involucrados, desde los productores y distribuidores hasta los consumidores finales. Para asegurar que las frutas y verduras lleguen en óptimas condiciones al hogar, es fundamental seguir las recomendaciones del Código de Prácticas de Higiene para las Frutas y Hortalizas Frescas (Codex Alimentarius), un conjunto de directrices internacionales que promueven la seguridad alimentaria en toda la cadena de suministro.
Uno de los aspectos clave del Codex Alimentarius es la educación del consumidor. Todos los interesados —gobiernos, industria, organizaciones de consumidores y medios de comunicación— tienen la responsabilidad de comunicar mensajes claros y coherentes sobre la manipulación segura de las frutas y hortalizas. En este artículo, nos centraremos en algunas de las prácticas recomendadas que pueden ayudarte a manipular correctamente estos productos, asegurando que lleguen frescos y seguros a tu mesa.
1. Evita Comprar Productos Dañados o en Condiciones Antihigiénicas
La calidad comienza desde el momento de la compra. Es importante evitar la adquisición de frutas y verduras que estén dañadas, podridas o se vendan en condiciones poco higiénicas, ya que estos factores aumentan el riesgo de contaminación microbiológica. Los productos dañados pueden ser más susceptibles a la presencia de bacterias, hongos y otros patógenos.
2. Minimiza el Aumento de la Temperatura Durante el Transporte
Una vez adquiridos los productos, evita el aumento de la temperatura durante el transporte y minimiza el tiempo de tránsito entre el establecimiento minorista y el hogar. El calor puede acelerar la descomposición y facilitar la proliferación de microorganismos. Si es posible, lleva una bolsa térmica o un refrigerador portátil para mantener los productos frescos, especialmente en climas cálidos.
3. Almacenamiento Adecuado: Refrigeración y Conservación
Las frutas y hortalizas deben almacenarse en un lugar fresco y seco. Algunos productos, especialmente los preenvasados, deben ser refrigerados tan pronto como sea posible para mantener su frescura y evitar la proliferación de bacterias. En nuestra tienda online, recomendamos seguir siempre las indicaciones del envase para asegurar un almacenamiento adecuado.
4. Consumo Rápido de Productos Elaborados Preenvasados
Si has comprado productos elaborados o preenvasados, es recomendable consumirlos lo antes posible una vez que los hayas sacado del refrigerador. Esto es especialmente importante para ensaladas y otros productos frescos que se deterioran rápidamente.
5. Manipulación Segura para Evitar la Contaminación Cruzada
La manipulación, preparación y almacenamiento de frutas y verduras deben hacerse con cuidado para evitar la contaminación cruzada con patógenos transmitidos por alimentos. Aquí hay algunos consejos:
- Lava tus manos con agua y jabón antes y después de manipular frutas y verduras.
- Utiliza tablas de corte y utensilios diferentes para productos crudos y cocidos.
- Lava bien las frutas y verduras antes de consumirlas, incluso si vas a pelarlas.
- Mantén los productos crudos alejados de carnes y otros alimentos que podrían contaminarlos.
6. Lava o Pela las Frutas y Verduras Antes de Consumirlas
Es fundamental lavar las frutas y hortalizas frescas con agua potable antes de consumirlas. En algunos casos, como las frutas de cáscara gruesa, es preferible pelarlas para reducir el riesgo de contaminación. Aunque muchas frutas y verduras tienen una apariencia limpia, pueden haber estado expuestas a contaminantes en su recorrido hasta llegar a ti.
Conclusión
En nuestra tienda online, nos comprometemos a ofrecerte productos frescos y de alta calidad. Sin embargo, la manipulación segura en el hogar es una parte esencial para mantener la inocuidad alimentaria. Siguiendo estas recomendaciones del Código de Prácticas de Higiene para las Frutas y Hortalizas Frescas (Codex Alimentarius), puedes disfrutar de las frutas y verduras con tranquilidad, sabiendo que estás protegiendo tu salud y la de tu familia.
Recuerda, la seguridad alimentaria es responsabilidad de todos. ¡Tú también puedes contribuir adoptando estas buenas prácticas en casa!